Algunos pavimentos son resistentes al fuego, siempre y cuando se apaguen inmediatamente. La cerámica, en cambio, no contiene plástico y resiste al fuego.
En nuestros hogares, el fuego es necesario para cocinar o para calentarse, pero siempre ha sido un elemento al cual prestar mucha atención, sobre todo si escapa de los lugares indicados, ya sea del fuego de la cocina o la chimenea.
Rodear estos espacios con cerámica, que es ignífuga, proporciona seguridad. La cerámica colocada en el antepecho de la encimera o en el suelo delante de la chimenea garantiza la protección de la superficie incluso en el caso de apoyar sartenes calientes, derramar líquidos calientes o caer chispas de fuego.